a mi no me gusta la gasolina...

resaca, resaca y más resaca... tela, hoy estoy para que me tiren a la basura... ayer hice una de aquellas cosas que pensé que nunca haría, pero mira, quizás estar lejos de casa en un sitio nuevo
da por hacer estas locuras...
después de un día traquilo fui al bar de juan a ver el barça, partido muy aburrido, para variar... la historia realmente acababa con el partido, pero juan ni corto ni perezoso se dedicó a invitarme a cañas y a cenar en su bar... yo con la pacha medio vacía empecé a notar el calorcito de las voll damms y me animé... de allí a una casa autonómica donde dabas clases de tango.. los camareros eran amigos de juan y nos invitaron a cañas y a un cuba libre... cerraron el garito y nos fuimos juan, una camarera y un camarero a un garito latino de la gran vía... yo ya iba como las cabras, más un par de cubatas dentro y empecé a perder la cabeza... recuerdo bailar cumbia, salsa y reggeton (o como se escriba), recuerdo no recordar, recuerdo a la pesada de la camarera apretándome y yo poniendo stops... hasta tal punto que me llegó a preguntar si era gay... jejej, "pues no, pero tengo pareja"... me empecé a encontrar de lado, incluso cero que hice alguna visita al lavabo... nos fuimos de allí sin encontrar a juan, que estaba por alí camelándose a una chikilla... me he despertado con cien máquinas de escribir tecleando alguna novela de umberto eco en distintos puntos de mi sesera y... joder, tenía en el salón la chaqueta y el jersei de juan... resulta ser que al pirar y coger las cosas de guardarropía nos llevamos lo de juan, ya que no aparecía... tela, pobre tío paseando una noche de febrero en madrid en manga corto... juer... me matará...

1 comentario:

Norma dijo...

Lo que hacen dos copas de más contigo para que acabes bailando reggeton... Y Juan no te matará, es demasiao "salao".
Besitos!